El Alcazaba de Busquístar en Busquístar, Granada, es un hotel con encanto que queda a unos 20 kilómetros del Parque Nacional de Sierra Nevada. Lo descubrimos un día que fuimos a Sierra Nevada a esquiar. anotamos su dirección y unos meses después fuimos a pasar unos días con las niñas y con mi madre. A mi progenitora le gusta mucho el campo.
Este hotel rural con mucho encanto está en una ladera empinada sobre el barranco de Trévelez a 1700 metros de altitud. Da casi miedo mirar hacia abajo. El hotel tiene dos construcciones simétricas escalonadas en los típicos terraos, tinaos y chimeneas alpujarreños. Está dividido en apartamentos con capacidad para seis personas. Tienes espacio de sobra para una familia de cuatro o cinco miembros. Nosotros éramos cinco con mi madre.
Mis hijas se entretuvieron mirando los aperos de labranza. Eran aperos de labranza que ya no se utilizan hoy día. Ahora el campo se cultiva con máquinas, no con azadas. Mi madre, en cambio, estaba fascinada con las lámparas árabes. Hubiera llevado un par para su casa si se las vendieran. El hotel está restaurando conservando arcones, suelos de barro cocido y decoraciones del pasado.
Os lo recomiendo. La Alcazaba de Busquístar en Busquístar, Granada, es un buen alojamiento para hacer senderismo. Hay alguna ruta por las Alpujarras interesante para los caminantes. Nosotros anduvimos un poco. Mi marido se animó a hacer una ruta a caballo con mi madre y con la niña grande. No hubo manera de detenerlos. Yo me quedé en el hotel sufriendo. Me dan miedo los caballos.
Tuvimos la suerte de que el hotel estaba completo. Mis hijas se hicieron muy amigas de unos niños ingleses que estaban con sus padres. Los ingleses apenas salían. Se entretenían jugando en el jardín y en la pequeña piscina. Menos mal que hizo buen tiempo. Yo temía que lloviera porque estábamos en otoño. No fue el caso. Pudimos disfrutar un jardín lleno de hojas secas.
Este hotel rural con mucho encanto está en una ladera empinada sobre el barranco de Trévelez a 1700 metros de altitud. Da casi miedo mirar hacia abajo. El hotel tiene dos construcciones simétricas escalonadas en los típicos terraos, tinaos y chimeneas alpujarreños. Está dividido en apartamentos con capacidad para seis personas. Tienes espacio de sobra para una familia de cuatro o cinco miembros. Nosotros éramos cinco con mi madre.
Mis hijas se entretuvieron mirando los aperos de labranza. Eran aperos de labranza que ya no se utilizan hoy día. Ahora el campo se cultiva con máquinas, no con azadas. Mi madre, en cambio, estaba fascinada con las lámparas árabes. Hubiera llevado un par para su casa si se las vendieran. El hotel está restaurando conservando arcones, suelos de barro cocido y decoraciones del pasado.
Os lo recomiendo. La Alcazaba de Busquístar en Busquístar, Granada, es un buen alojamiento para hacer senderismo. Hay alguna ruta por las Alpujarras interesante para los caminantes. Nosotros anduvimos un poco. Mi marido se animó a hacer una ruta a caballo con mi madre y con la niña grande. No hubo manera de detenerlos. Yo me quedé en el hotel sufriendo. Me dan miedo los caballos.
Tuvimos la suerte de que el hotel estaba completo. Mis hijas se hicieron muy amigas de unos niños ingleses que estaban con sus padres. Los ingleses apenas salían. Se entretenían jugando en el jardín y en la pequeña piscina. Menos mal que hizo buen tiempo. Yo temía que lloviera porque estábamos en otoño. No fue el caso. Pudimos disfrutar un jardín lleno de hojas secas.
----------------------------